Oaxaca. El 30 por ciento de jueces y magistrados federales en activo decidieron participar en el proceso de elección que conformará, en 2025, a través de voto directo, al próximo Poder Judicial de la Federación (PJF), informó hoy en Oaxaca la ministra Yasmín Esquivel, una de las defensoras del nuevo marco normativo.
Integrante de la Suprema Corte desde marzo de 2019, Esquivel Mossa también confirmó que tanto ella como sus compañeras Lenia Batres y Loretta Ortiz intervendrán en los comicios con el objetivo de mantener sus lugares en el máximo tribunal del país.
“El 30 por ciento de los jueces y magistrados en activo, al igual que yo, han aceptado participar en el proceso electoral”, indicó la ex presidenta del Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México, tras intervenir como invitada en el informe de resultados de la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, Berenice Ramírez.
“En el caso de la ministra Loretta Ortiz y de la ministra Lenia Batres, ellas han decidido participar y a mí me parece que son personas con una gran nivel competitivo en función no tan sólo del aspecto jurídico, sino también en el aspecto de la participación ciudadana”, subrayó Esquivel.
En la Suprema Corte, el próximo año serán nombrados nueve ministros o ministras.
Por su parte, ocho de los 12 ministros y ministras que actualmente integran la SCJN anunciaron con anticipación, durante la discusión de la Reforma Judicial, su renuncia y que no participarían en el periodo electivo.
En lo que respecta a los magistrados y magistradas, así como jueces y juezas que han decidido intervenir en la elección, Esquivel resaltó que todos ellos “han llegado a esas posiciones a través de sus méritos a través de exámenes de oposición a través de toda una trayectoria han llegado a desempeñar esta función y hoy han aceptado participar”.
Sobre la posibilidad de que el proceso electivo se trate de una simulación y de que en realidad se busque beneficiar únicamente a ciertos personajes afines a la llamada Cuarta Transformación, como es el caso de Lenia Batres, hermana de Martí Batres, ex senador por Morena, ex jefe de gobierno de la Ciudad de México y actual director del ISSSTE, afirmó que la reforma tuvo el objetivo de combatir el nepotismo en el Poder Judicial, así como cualquier otro acto de corrupción; ante ello, refirió que existe piso parejo.
“El piso parejo debe existir, piso parejo como lo debe haber en cualquier lugar y en cualquier competencia electoral, y, en este caso, se trata de un proceso electoral para elegir ministros de la Corte, y hay piso parejo para todos, no debe haber favoritismos… no hay favoritismos: yo no veo ni alcanzo a ver ningún favoritismo”, aseguró en conferencia de prensa.
Asimismo, la ministra rechazó que las candidaturas puedan ser manipuladas para favorecer o perjudicar a alguien, pues las personas que sean calificadas como idóneas para aspirar a una candidatura por los comités de evaluación, serán sometidas a una insaculación para definir a las personas que finalmente aparecerán en las boletas, en una práctica, sin embargo, que ha sido promovida por el partido Morena en todos sus niveles de dirigencia.
Además, a pesar de que continúan vivos diversos juicios de amparo contra la Reforma Judicial, la ministra Esquivel descartó que algún mecanismo pueda echar abajo la nueva normativa.
“Ya en el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se determinó que es improcedente impugnar la propia Constitución federal; entonces, no se tiene ninguna posibilidad de que cambien las cosas.
“El proceso de reforma electoral va bien… el proceso de reforma electoral que viene conviene y yo les puedo decir que no hay ninguna posibilidad de que la reforma al Poder Judicial cambie y conforme se va llevando y avanzando el tiempo, va tomando aún mayor madurez lo que será la próxima elección”, reiteró.
