1 de cada 3 hombres, dice haber tenido una eyaculación precoz, se considera precoz una eyaculación que no supera los 3 minutos.
Por otro lado la anorgasmia o imposibilidad de lograr el orgasmo no es algo ajeno a los hombres y, según distintos estudios, puede afectar a hasta el 12% de la población masculina.
Invité a nuestro urólogo, Dagoberto Molina para entender las causas y diferencias entre eyaculación precoz y anorgasmia masculina.
¿Qué onda con la salud reproductiva masculina?
De acuerdo a The Mayo Clinic, 1 de cada 3 hombres reconocen haber eyaculado precozmente en algún momento y el 85% no busca a un doctor para tratarlo. La anorgasmia o imposibilidad de lograr el orgasmo puede afectar a hasta el 12% de la población masculina.
1 de cada 10 hombres no llega al orgasmo, el consumo de antidepresivos, la disfunción eréctil y el no conseguir «dejarse llevar» en las relaciones, son factores comunes de este trastorno.
¿Qué es la eyaculación precoz?
En los hombres, la eyaculación precoz se produce cuando el semen sale del cuerpo (es decir, eyaculan) antes de lo deseado durante las relaciones sexuales. La eyaculación precoz es un problema sexual común y no debe ser motivo de preocupación si no sucede seguido.
El síntoma principal de la eyaculación precoz es no poder retardar la eyaculación durante más de tres minutos después de la penetración.
¿Cuáles son los síntomas?
Siempre o casi siempre eyaculas en un lapso de 1 a 3 minutos después de la penetración. No puedes retrasar la eyaculación durante el sexo nunca o casi nunca. Te sientes afligido y frustrado y como consecuencia, tiendes a evitar la intimidad sexual.
La eyaculación precoz se clasifica en dos: de por vida: Se produce todas o casi todas las veces desde el primer encuentro sexual y adquirida: Se manifiesta después de haber tenido experiencias sexuales sin problemas de eyaculación.
Las causas son: se desconoce la causa exacta de la eyaculación precoz. En un momento, se creía que era solo un problema psicológico, sin embargo, ahora se sabe que la eyaculación precoz implica una interacción compleja de factores psicológicos y biológicos.
Causas psicológicas:
- Experiencias sexuales tempranas
- Abuso sexual
- Imagen corporal negativa
- Depresión
- Sentimientos de culpa que pueden hacer que te apresures durante los encuentros sexuales
- Disfunción eréctil: La ansiedad por lograr o mantener una erección podría formar un patrón de apresurarse a eyacular, el cual puede ser difícil de cambiar.
- Ansiedad: Es común que la eyaculación precoz y la ansiedad ocurran al mismo tiempo. La ansiedad puede estar relacionada con el desempeño sexual o con otros problemas.
Causas biológicas:
- Niveles hormonales irregulares
- Niveles irregulares de sustancias químicas cerebrales
- Hinchazón e infección de la próstata o la uretra
- Rasgos hereditarios
¿Qué es la anorgasmia masculina?
Tanto en hombres como en mujeres, puede darse la situación de no lograr el orgasmo en las relaciones sexuales. En el caso de los hombres, está ligado a la eyaculación, y por eso, en esta dificultad, la falta de orgasmo responde también a una falta de eyaculación (aunque no en todos los casos). Los hombres que viven una anorgasmia suelen compartir ciertos síntomas:
- A pesar de tener excitación, antes y durante el encuentro sexual, no son capaces de alcanzar el orgasmo.
- En algunos casos, tampoco llegan a eyacular, pero incluso en los que la eyaculación se da, la sensación que acompaña a esta no es placentera, sino todo lo contrario.
- Ansiedad, enojo, o irritación que termina afectando la relación con su pareja y hasta incluso puede dejar de tener orgasmos con la masturbación.
¿Cuáles son las causas?
Causas fisiológicas: Puede deberse a una estimulación genital no adecuada o insuficiente, a los efectos secundarios que ocasionan ciertos fármacos como los antidepresivos, o a enfermedades como la diabetes, las lesiones medulares, o la esclerosis múltiple.
Causas psicológicas: Haber interiorizado una moral muy estricta, entendiendo las relaciones sexuales como un pecado, lo que produce sentimientos de culpa o de rechazo. Vivir relaciones sexuales iniciales poco satisfactorias. Sentir insatisfacción por tu propio cuerpo. Presencia de una baja autoestima.