El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió que se demuestre que sus hijos han incurrido en actos de corrupción y reprochó la publicación de trabajos periodísticos relativos a la forma en que ha crecido el patrimonio de Rocío Nahle, candidata de Morena al gobierno de Veracruz.
“(Hay) Una campaña abierta en contra de quien fue la secretaría de Energía, pero no presentan ninguna prueba, nada, todo es falso, y la mayoría de los medios están en eso”, dijo en su conferencia matutina.
El empresario Arturo Castagné ha dado a conocer que Nahle es dueña de un departamento con valor de 28 millones de pesos en San Pedro Garza García, que no estaba incluido en su declaración patrimonial, que vive en una casa en el lujoso fraccionamiento El Dorado, y que su hija ocupaba un departamento en Nueva York por el que se pagan 100 mil pesos mensuales.
Latinus ha dado a conocer una serie de reportajes titulados “El Clan” en torno a la red de tráfico de influencias manejada por Andrés y Gonzalo “Bobby” López Beltrán, y operada por Amílcar Olán, un empresario amigo de sus hijos que ha recibido contratos millonarios del gobierno, ya sea para la compra de medicamentos o de material para la construcción del Tren Maya.
“Corrupción de mis hijos, pruebas, ¿dónde están? Mis hijos no son corruptos y demuéstrenme lo contrario, los desafío”, dijo.
Latinus ha dado a conocer audios en los que Olán habla con sus cercanos acerca de los contratos que recibirá y las propias autoridades, como el gobierno de Quintana Roo, han confirmado que se le compró sin licitación un lote de medicinas por más de 200 millones de pesos.