El rector de la Universidad Iberoamericana Luis Arriaga Valenzuela, compartió la lamentable situación que vive la comunidad jesuita por el asesinato de Joaquín Cesar Mora Salazar y Javier Campos Morales
En el espacio de “Así las Cosas” con Gabriela Warkentin y Javier Risco, detalló que Joaquín Cesar Mora Salazar, quien tenía 81 años de edad e ingresó a finales de los 50 a la Compañía de Jesús en Monterrey, en donde se ordenó a los 17 años, y dedicó su vida a las comunidades de la Sierra Tarahumara a últimas fechas en Cerocahui.
Javier Campos Morales, el Gallo, dijo, vivió en Monterrey ingresó al instituto de Ciencias en Guadalajara y a la Compañía de Jesús a los 16 años, ordenándose en 1972, estuvo toda su vida en la Tarahumara con diversos cargos como párroco, vicario y vicario de la pastoral indígena, con el conocimiento de la lengua y la cercanía con la gente.
Recalcó que los jesuitas “somos hombres de frontera”, vamos a las comunidades a donde nadie quiere ir con el respeto de las tradiciones de las comunidades y el compromiso de mantener la excelencia académica, una formación integral, pero también con las exigencias de justicia en México.
Finalmente demandó la falta de garantías a la comunidad, justicia, reparación y el esclarecimiento y localización de los cuerpos de los dos jesuitas y el civil desaparecidos.