Oaxaca.- Deberán pasar al menos 10 años, antes de que las tierras sobre las que actualmente yace el tiradero de basura de la Villa de Zaachila puedan ser utilizadas para proyectos de infraestructura, sostuvo la regidora primera de la agencia Vicente Guerrero, Fidelia Mosqueda Gracida.
En una asamblea general convocada por la organización Colonias Unidas de Zaachila el domingo pasado, 15 horas después del cierre definitivo del basurero metropolitano, Mosqueda Gracida agregó que las 17 hectáreas que conforman el tiradero no podrán ser utilizadas para labores de cosecha sino únicamente para llevar a cabo la construcción de áreas de esparcimiento.
“Ahora debemos trabajar bastante. Vamos a tener que exigir que el saneamiento se haga porque es una bomba de tiempo, es una gran concentración de gas, hay acumulación, también, de lixiviados”, advirtió la representante.
“No porque cerremos hoy (el tiradero) quiere decir que hemos ganado todo. Iniciamos con una etapa nueva para sanear lo que tenemos enfrente, que es el tiradero; hay que sanear cada una de esas partes para que en algún momento esas tierras, aunque van a pasar más de 10 años, puedan volver a ser una tierra útil ya no para siembra, pero sí una tierra en la que se puedan hacer espacios públicos en beneficio de esa zona”, sostuvo la funcionaria.
Después de que el sábado a las 15:00 horas los habitantes de la agencia Vicente Guerrero y colonias circunvecinas cerraron definitivamente el acceso al basurero, los líderes del movimiento convocaron a una asamblea a partir de las 7:00 horas del domingo.
En la reunión, decenas de personas encabezadas por el cabildo de la agencia y presidentes de colonias, escucharon cuáles serán los proyectos que deberán ser implementados, una vez conseguido el cierre.
“No se cerró por un capricho, se cerró porque existe una gran necesidad, también tenemos que ser beneficiados en nuestra salud. Ya no hay espacio en dónde tirar más basura por eso es que se llegó al cierre de este tiradero”, subrayó Mosqueda Gracida.
En el evento, además de la regidora, participaron oradores de las colonias Santa Isabel, Rancho Viejo y Alarí, así como organizaciones de pepenadores, que, aún en contra de sus intereses, determinaron apoyar la clausura del espacio.
Nos quisieron calentar la mano
En su intervención y sin especificar datos, la presidenta de la colonia Alarí, Martha Guadalupe Castro González, afirmó que autoridades de diversas instancias de gobierno intentaron sobornar a los dirigentes para que permitieran que el tiradero continuara operaciones.
“Es lamentable que la gente que estuvo detrás de esto, permitió este ecocidio”, criticó.
“Fuimos víctimas de muchas cosas, entre ellas el soborno. Quisieron calentarnos la mano y muchos creyeron que sí lo hicieron; sin embargo, aquí estamos y estamos dando la cara porque no fue así; si así hubiera sido, esto no se hubiera logrado” agregó la líder, docente de profesión.
Sobre las versiones que han acusado que el cierre del tiradero se trata de un acto mediático-político y que en unos meses el espacio será reabierto, afirmó que
“en nosotros está permitir que vuelvan a entrar camiones de basura, en nosotros está permitir que vuelva a abrirse este basurero, pero no nos vamos a dejar”.
Castro, también aprovechó el micrófono para responder las críticas que han recaído sobre los habitantes de Colonias Unidas, a los que acusan de ser paracaidistas que arribaron al lugar cuando ya funcionaba el tiradero municipal, al cual ahora se oponen.
“El vivir es una necesidad para todos y si estamos de este lado es porque hasta ahí nos llegó nuestra economía para comprar. Desafortunadamente, la población creció y qué bueno porque no todo el tiempo puede estar eso (el tiradero) ahí… ni aquí ni en ningún lugar”, sentenció.
“Del basurero no recibimos ni un peso”
Otro de los oradores denunció: “Nosotros, del basurero, no hemos recibido ni un solo peso; del basurero, no hemos recibido ningún apoyo durante los 42 años que estuvo en la zona oriente; al contrario, fuimos contaminados, nos traía mucha contaminación”.
El representante vecinal sostuvo que el basurero, fundado en 1980, estaba proyectado para 25 años y no para 42, cómo finalmente sucedió.
“Resulta que se olvidaron de esos 25 años y nos dejaron respirar el mal olor; dejaron que corrieran los lixiviados por las calles principales…dejaron este basurero que lleva 42 años.
“De 25 años de vida, se olvidaron y nos lo dejaron 42 años y aún así han querido la ampliación. Piensan que no somos seres humanos, piensan que no percibimos los malos olores, piensan que nosotros no nos podemos enfermar por los lixiviados, por esas aguas sucias que corren”.
Después de una hora de discursos, los ciudadanos reunidos hicieron un recorrido por el territorio que abarca el basurero. Al compás de la música de banda y con el estruendo de cohetes, lanzaban vítores por la materialización de la que fue su principal demanda durante lustros: el cierre definitivo del relleno sanitario.
Los habitantes de las Colonias Unidas de Zaachila realizaron la tarde de este sábado el cierre definitivo del tiradero de basura ubicado en la agencia Vicente Guerrero, que durante 42 años recibió los residuos sólidos generados en Oaxaca capital y al menos otros 25 municipios del área metropolitana
Minutos antes de las tres de la tarde de este sábado ocho de octubre, el último camión recolector del ayuntamiento de la Villa de Zaachila ingresó a la zona y luego de que sus operadores concluyeron las maniobras de descarga, los ciudadanos bajaron y aseguraron la pluma metálica que permitía el acceso al inmueble.