La mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México prevé que las presiones inflacionarias continúen disminuyendo hacia delante.
Los integrantes del Banco de México (Banxico) anticiparon que habría una Inflación de 3 por ciento en la economía mexicana hasta el último trimestre de 2024, luego de que la pandemia disparó los precios de bienes y servicios
“La mayoría mencionó que los pronósticos de Banco de México para las inflaciones general y
subyacente se ajustaron marginalmente”, revela la minuta de Reunión de la Junta de Gobierno del Banco de México, con motivo de la decisión de política monetaria anunciada el 30 de marzo de 2023.
“Señaló que se sigue anticipando que la inflación converja a la meta en el cuarto trimestre de 2024”, reveló el documento publicado por el banco central.
Un integrante del Banco de México puntualizó que solo para el primer y segundo trimestre de 2023 se revisaron a la baja los pronósticos de la inflación general y al alza los correspondientes al componente subyacente.
Otro economista de Banxico apuntó que la inflación no subyacente se ha ubicado por debajo de lo previsto.
Un representante más del organismo encargado de la política monetaria notó que los pronósticos a lo largo del horizonte consideran la previsión de que los efectos de los choques de la pandemia y del conflicto bélico se desvanecen gradualmente, así como las acciones de política monetaria que se han instrumentado.
La mayoría de los integrantes de Banxico prevé que las presiones inflacionarias continúen disminuyendo hacia delante.
Un integrante de Banco de México añadió que la reducción en la inflación de mercancías irá siendo
más notoria y que posiblemente la inflación de los servicios se estabilice.
También detalló que la mitigación que se ha observado en los choques globales que han afectado a algunos precios de servicios se reflejará eventualmente en este componente. Aseveró que, si bien los precios internacionales de los alimentos llevan algunos meses disminuyendo, fue hasta marzo que sus variaciones anuales se volvieron negativas.
En este contexto, consideró que hacia delante podría observarse una reducción más notoria de la inflación de las mercancías alimenticias y de los servicios de alimentación.
Detalló que estos dos componentes explicaron el 64 por ciento del último dato de inflación.
Entre los riesgos al alza para la inflación, la mayoría mencionó la persistencia del componente subyacente en niveles elevados.
Algunos integrantes del Banxico señalaron el riesgo inflacionario ante el apretamiento del mercado laboral. No obstante, algunos destacaron que, con base en estimaciones realizadas en el Banco de México, no se está observando una espiral precios-salarios.
Uno agregó que el fenómeno de la relocalización de las cadenas productivas podría incrementar las presiones existentes en el mercado inmobiliario.