Tras doce horas de discusión el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó por mayoría calificada de 359 votos a favor y 135 en contra, en lo general, la reforma constitucional al Poder Judicial que entre otras cosas contempla la elección por voto popular de ministros, magistrados y jueces.
Se tenía previsto que la discusión de esta iniciativa se realizaría en varios días, pero luego del bloqueo a los accesos a la Cámara de Diputados, por parte de los trabajadores del Poder Judicialy estudiantes universitarios de la carrera de Derecho para impedir su discusión, los legisladores decidieron aprobar la reforma tanto en lo general como en lo particular en una sola sesión y en una sede alterna, eligieron la Sala de Armas de la Ciudad Deportiva para aprobar ahí dicha propuesta de López Obrador.
Los diputados opositores calificaron esta reforma de ser destructiva y de un abuso de poder de parte de Morena, aseguraron que Poder Judicial no libera delincuentes a diferencia de López Obrador que liberó a Ovidio Guzmán.
Mientras que los oficialistas insistieron que dar una sacudida al Poder Judicial es un mandato popular y la minoría no puede impedirlo.
El líder de la super mayoría morenista, Ricardo Monreal reiteró que la polémica reforma pone fin a la tiranía de la toga y el birrete, y ofrece un nuevo paradigma en la impartición de la justicia.
“Proponemos un cambio crucial, modificar la forma de nominar a los jueces e incluir nuevos criterios para impartir justicia en México. La elección de los ministros en más de cien mil casillas dará la mayor independencia imaginable. Cómo pueden afirmar que es antidemocrático elegir a jueces, magistrados y ministros”.
Pero los opositores se lanzaron con todo contra la reforma al Poder Judicial, por ejemplo, la diputada del PAN Paulina Rubio aseguró que dichas modificaciones constitucionales destruyen, con mentiras, a uno de los poderes públicos más importantes del país.
“Estamos tan lejos de Dinamarca y tan cerca de Venezuela. Está no es una reforma para la gente porque si lo fuera incluirían a las fiscalías, pregunten a una mujer cuánto tarda en denunciar una violación en una fiscalía y esta reforma no las toca. Lo único que hicieron fue cumplir la primera promesa de López Obrador: mandar al diablo las instituciones. Lo decimos fuerte y claro Morena como las ratas se esconde en la alcantarilla, porque hoy Morena destruye la República”.
Los panistas volvieron a autodenominarse “la resistencia” a la 4T, la última trinchera de la dignidad y la libertad en México.
En la larguísima sesión que se prolongó hasta este miércoles , se presentaron cerca de 800 reservas que se discuten en estos momentos en lo particular.