Oaxaca.- Directivos de una institución educativa de nivel superior fueron acusados de cometer actos de discriminación en contra de una mujer oaxaqueña a la que por acumulación de faltas dieron de baja del sexto semestre de la carrera de Derecho, a pesar de que notificó que estaba siendo sometida a un tratamiento médico en la Ciudad de México.
Ante ello, la agraviada, Suani Agustín Aparicio, interpuso un recurso de amparo, por lo que un juez federal ordenó de manera provisional al centro educativo, UNIREU campus Oaxaca, no vulnerar los derechos a la educación de la ciudadana y que pueda reincorporarse a sus estudios; sin embargo, la institución aún no responde.
La estudiante sostuvo que los directivos de la escuela la dieron de baja por faltar en seis ocasiones a su jornada académica; no obstante, recriminó que sus ausencias fueron por cuestiones médicas debido a que cursó un embarazo de alto riesgo y que ello le fue notificado a los directivos.
En conferencia de prensa, precisó que cuando solicitó que le permitieran concluir el semestre y someterse a los exámenes correspondientes, la respuesta que recibió fue negativa, con el argumento de que la fase de estudios ya había terminado y que sería dada de baja.
Incluso, la estudiante acusó a la coordinadora Nancy González, de haberle sostenido que debía escoger entre sus hijas y su formación académica.
“En vez de que la universidad tomara alternativas para continuar con el derecho a la educación, ejercieron actos de discriminación. Le dieron a escoger entre la vida de sus hijas y la educación”, comentó la representante jurídica de la madre de familia.
“Yo no me presenté a la escuela el 8 y 15 de junio y me están dando de baja. Me presenté con la coordinadora Nancy (González) para pedirle una prórroga para ausentarme de mis clases y poder atender el problema de mis hijas, un tratamiento de maduración de órganos”, precisó la denunciante.
“La respuesta de ellos fue que no me daban ningún apoyo y que automáticamente me daban de baja. Me dieron dos opciones, la coordinadora Nancy, y era elegir la vida de mis hijas o elegir el estudio”, reiteró.
La representante legal de la mujer refirió que pidieron alternativas para que Suani Agustín no perdiera el semestre y pudiera acreditar las materias a través de evaluaciones; no obstante, la coordinadora se negó a recibir los escritos.
Posteriormente, a través de correo electrónico, la institución respondió el 14 de agosto que no podía hacer nada por la alumna.
Ante ello, tanto la joven como su representante legal están a la espera de que la institución sea notificada del fallo.
Este medio buscó una respuesta de los representantes de la universidad a las acusaciones de la ciudadana, pero al tocar la puerta principal de la sede, sobre la calle de Guerrero en el centro de la ciudad de Oaxaca, no fue atendido.
