Un coágulo sanguíneo que se forma dentro de una de las venas o las arterias se denomina trombo y también se puede formar en el corazón. Un trombo que se desprende y viaja desde un lugar en el cuerpo a otro se llama émbolo.
Tipos de coágulos
Coágulos arteriales. Una vez formados, los coágulos arteriales causan síntomas inmediatamente. El hecho de que este tipo de coágulo no permite que el oxígeno llegue a los órganos vitales, puede causar una variedad de complicaciones tales como ataques cerebrales, ataques cardíacos, parálisis y dolor intenso.
Una obstrucción en una arteria puede impedir que el oxígeno llegue a los tejidos en esa área, lo cual se denomina isquemia. Si la isquemia no se trata oportunamente, puede provocar daños en los tejidos o la muerte.
Coágulos venosos. Por lo general, se forman lentamente durante un período de tiempo. Los síntomas de los coágulos sanguíneos venosos se hacen más notables en forma gradual. Una obstrucción en una vena generalmente provocará acumulación de líquido e hinchazón.
Un coágulo de sangre puede bloquear una arteria o una vena en el corazón, afectando:
- El corazón (angina de pecho o un ataque cardíaco)
- Los intestinos (isquemia mesentérica) o trombosis venosa mesentérica
- Los riñones (trombosis de la vena renal)
- Las arterias de las piernas o brazos
- Las piernas (trombosis venosa profunda)
- Los pulmones (embolia pulmonar)
- El cuello o el cerebro (accidente cerebrovascular)
Síntomas de coágulo en el corazón:
- Dolor en el pecho y el brazo izquierdo
- Transpiración
- Dificultad para respirar
Especialista: Dr. Manlio Fabio Márquez. Cardiólogo, especialista en arritmias. Jefe de Electrofisiología del Campus Observatorio del Centro Médico ABC. Presidente del Consejo Mexicano de Cardiología. Miembro de la Sociedad Interamericana de Cardiología, de la Academia Nacional de Medicina y de la HEART RHYTHM SOCIETY.