La Fiscalía General del Estado de Oaxaca inició las investigaciones luego del hallazgo de una niña y un niño sin vida, la mañana de ayer sábado a un costado de la carretera Canal 33, en el tramo El Espinal -Juchitán de Zaragoza, en el Istmo de Tehuantepec.
La institución desplegó un equipo multidisciplinario para realizar las primeras indagatorias; el padre de los menores, Wilbert A. C. fue detenido y declaró en relación a los hechos.
De manera preliminar se conoció que los hermanos, Perla y Daniel, de 9 y 6 años, eran obligados a vender frituras en vía pública, vivían con su papá en la colonia Fidel Peña, del municipio de Juchitán de Zaragoza, separados de la mamá.
Los primeros dictámenes periciales revelaron que ambos fallecieron asfixiados, además presentaban heridas en cuello y muñecas.
La Policía Municipal aseguró al papá luego de que este llegó al lugar de los hechos, identificó a los chicos e intentó retirarse del lugar, además, cayó en contradicciones al mencionar que estaban desaparecidos, pero tampoco lo reportó a la Unidad de Búsqueda de Personas No Localizadas (DNOL).
Al trascender la noticia que consternó a la comunidad zapoteca del Istmo, personas cercanas a la niña y el niño revelaron que ambos eran explotados por el padre y la abuela, al obligarlos a vender frituras en los bares y las cantinas de la ciudad, y en caso que no llegar con dinero a casa eran castigados a golpes.
De su lado, el gobernador del estado, Salomón Jara sostuvo mantendrá contacto permanente con la Fiscalía para llegar al fondo del caso.
“Lamentamos y condenamos enérgicamente la muerte de dos menores de edad en El Espinal, en la región del Istmo. Nuestro gobierno hará todo lo que esté en sus manos para esclarecer los hechos y castigar con todo el peso de la ley a los responsables”, escribió en redes sociales.