Alrededor de dos horas fue la duración del encuentro que la mañana de este jueves tuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador y los integrantes de su gabinete legal y ampliado en Palacio Nacional, el objetivo analizar las estrategias para ajustar un poco más el cinturón del gasto gubernamental y pasar de la austeridad a la pobreza franciscana.
Y es que de acuerdo al propio Primer Mandatario, a pesar de la reducción que se dio desde el inicio de su gobierno, aún existe margen para hacer los ajustes necesarios.
“Sí hay siempre márgenes, tenemos que cuidar todos los gastos de operación, ayer hablaba yo que no hemos comprado vehículos nuevos, ¿cuándo se había visto eso, en qué gobierno? Si lo primero eran los carros y aviones, todo eso ya no existe y el ejemplo lo da presidencia”.
Entre los ajustes ha mencionado el reducir todavía más los gastos al extranjero. Aún se desconocen mayores detalles de cómo se implementará la llamada pobreza franciscana y adelantó que las medidas no implicarían el despido de trabajadores además que está garantizado el presupuesto para programas sociales, obras prioritarias y salarios.
Es que tras la reunión que comenzó poco antes de las 11 de la mañana, los secretarios de estado decidieron guardar silencio y sólo se vio salir en primer lugar al director de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero, así mismo al de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, también se vio salir a Adán Augusto López, secretario de Gobernación, acompañado de Roberto Salcedo, secretario de la Función Pública, y entre otras la secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde.
El jefe del Ejecutivo Federal, sólo compartió a través de sus redes sociales que hubo análisis con los responsables de programas para el bienestar y y de obras estratégicas para evaluar el avance, analizando los desafíos y reafirmando el compromiso de seguir trabajando con intensidad, profesionalismo, honestidad y en beneficio del pueblo mexicano.