EFE.- El Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal (Fed) inicia este martes su primera reunión del año y la primera bajo el segundo mandato del presidente estadounidense, el republicano Donald Trump, que le ha pedido que baje los tipos de interés “inmediatamente”, aunque el organismo ya advirtió en 2024 que este año iba a rebajar el ritmo.
En la última reunión, el 17 y 18 de diciembre, todavía bajo la administración del demócrata Joe Biden (2021-2025), la Fed bajó los tipos por tercera vez en ese año, hasta un rango del 4.25 al 4.5 %, y anticipó un nivel de recortes más lento señalando que su política actual ya es menos restrictiva y que pueden ser prudentes.
El nuevo mandatario estadounidense, no obstante, ha subrayado públicamente que quiere celeridad. El pasado 23 de enero, en una conexión por videollamada con el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), indicó que con la caída de los precios del petróleo, iba a exigir que las tasas bajen “inmediatamente”.
Según Erik Weisman, economista jefe de la gestora de inversiones MFS Investment Management, la expectativa generalizada es que los tipos se mantendrán en esta ocasión sin cambios.
“El mercado tendrá muchas preguntas, pero probablemente no obtendremos demasiadas respuestas. El mercado estima aproximadamente un 2% de probabilidad de un recorte por parte de la Fed en marzo y no anticipa plenamente un recorte hasta junio”, indicó en un comunicado.
Los mercados, en su opinión, estarán particularmente atentos a las opiniones del presidente de la Fed, Jerome Powell, en la conferencia de prensa posterior al anuncio de la decisión el miércoles, aunque el experto estima que adoptará una postura cautelosa a la espera de ver el impacto de las primeras medidas de Trump.
El líder republicano llegó a la Casa Blanca con una promesa de mano dura en materia migratoria y en su primera semana el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) dice haber detenido al menos a 2 mil 382 migrantes indocumentados y haber cursado mil 797 órdenes de captura contra ciudadanos susceptibles de ser deportados.
“Existen indicios anecdóticos de que estas políticas podrían afectar negativamente, y casi de forma inmediata, la tasa de participación en la fuerza laboral, con posibles implicaciones para las tasas de inflación salarial y del consumidor”, recalca Weisman.
Cristina Gavín, jefa de renta fija y gestora de fondos de Ibercaja Gestión, coincidió en que en esta primera reunión del año el mercado da por hecho que no habrá ningún movimiento de tipos.
La actuación de la Fed, añade, va a estar muy marcada por los efectos que las medidas de la nueva administración de Trump tengan tanto a nivel de crecimiento como de empleo y sobre todo de inflación.
La Oficina de Análisis Económico (BEA) de Estados Unidos publicará el jueves sus primeros cálculos del producto interior bruto (PIB) del cuarto trimestre y del año 2024. Los últimos datos se dieron a conocer el 19 de diciembre y apuntaron que la economía estadounidense creció el 0.8% en el tercer trimestre, una décima más de lo estimado anteriormente.
El índice de precios al consumo (IPC) subió dos décimas en diciembre, hasta el 2.9% interanual, frente al 2.7% de noviembre, y cerró 2024 lejos del objetivo del 2% y con un repunte que complica el ritmo de bajada de los tipos iniciado en septiembre por la Fed.
“Si Trump sigue adelante con su retórica antimigración, la escasez de mano de obra en Estados Unidos podría empeorar, empujando aún más los salarios y la inflación”, recalca Michaela Huber, estratega senior de Activos Cruzados en la gestora Vontobel.
Hay que seguir pendiente, además, de riesgos geopolíticos como las tensiones en Medio Oriente o el conflicto entre Rusia y Ucrania, que podrían desencadenar una perturbación del suministro energético, cuyo impacto en la economía también podría afectar a las decisiones de la Fed.