Si les urge tranquilizarse, es momento de utilizar la música a su favor. Les hicimos una lista de canciones que tienen que escuchar y tener en sus playlists.
La música para relajarnos
A ver, seamos sinceros: todos andamos en modo Miss Productivity 2025, con listas interminables de cosas que hay que hacer, terminar e inventar. Tenemos, como sociedad, una sensación de que, si paramos un segundo, el mundo entero se viene abajo.
Pero no somos robots, y aunque quisiéramos, ni el mejor café del mundo puede mantenernos en ese modo para siempre. La buena noticia es que hay una herramienta simple y súper poderosa (parece hasta mágica) que nos puede ayudar a respirar de nuevo: la música.
Sí, esa playlist que creaste con tus ex canciones favoritas o el reguetón que usas para lavar los platos (se vale, no juzgamos). La música no solo está ahí para hacer ruido de fondo o armar la fiesta, es en regulador para nuestro sistema nervioso, un abrazo para el alma.
Literalmente puede cambiar nuestro estado de ánimo, calmarnos y hasta hacer que nos den ganas de llorar de pura felicidad.
La música y tu cerebro: bff4ever
Cuando escuchamos música, nuestro cerebro se activa como si alguien le hubiera echado gasolina. Entra en acción todo: las emociones, la memoria, la creatividad, incluso las ganas de bailar. ¿Por qué? Porque no solo percibimos sonidos; esos beats y melodías van directito al sistema límbico, el centro de nuestras emociones, como si fueran un masaje emocional.
Y no solo nos hace sentir, también nos conecta. ¿Sabías que al escuchar música se activan las mismas partes del cerebro que usamos para empatizar con otros? Por eso es que lloramos en conciertos, nos emocionamos cuando alguien canta con nosotros o compartimos canciones como si fueran confesiones. La música es nuestra forma de decir “te entiendo” sin abrir la boca.
¿Cómo usar la música para calmar el caos?
Spoiler: no cualquier canción sirve. Si te estás arrancando los pelos de los nervios, probablemente no es momento para poner el último perreo. Aquí entra la estrategia: crear una playlist que sea como tu kit de primeros auxilios, con canciones que te regulen y te hagan sentir como si estuvieras en un spa (aunque estés atrapado en el tráfico).
Música clásica
Ya sabemos que para mucho suena aburrido, pero denle una oportunidad a“Clair de Lune” de Debussy o “Nocturne Op. 9 No. 2” de Chopin, son como té de manzanilla en forma de sonido. Pinky promise que se van a relajar al instante, aunque no tengan idea de quién es Chopin.
Mantras y vibes zen
Si el estrés está al 100, prueben con algo como “Om Mani Padme Hum” o las canciones de Deva Premal. Es como si los envolvieran en una cobija de calma. Para efectos más poderosos, cierren los ojos y respiren profundo.
Confort balladas
Ojo, hay música que podría no entrar en el “esterotipo” zen y que funciona exactamente igual. El simil es cuando ponemos Friends o Modern Family de fondo solo porque es ruido que nuestro cerebro reconocer y por ende, se calma. Hay canciones que tienen el mismo efecto. Por ejemplo, “Drivers License” de Olivia Rodrigo o “Provenza” de Karol G.
Sonidos de la naturaleza
Llueve, truene o relampaguee, los sonidos de la naturaleza nunca fallan. Pongan algo con lluvia, olas o canto de pajaritos y, en minutos, se sentirán como en medio del bosque, aunque sigamos en la oficina llenos de pendientes.
Música ambiental moderna
Si lo suyo no es lo clásico ni lo zen, prueben con algo tipo Ludovico Einaudi (“Nuvole Bianche”) o Max Richter (“On the Nature of Daylight”). Es relajante, pero moderno, como una versión cool del spa. Ustedes prueben y poco a poco irán curando la playlist perfecta para tranquilizarse en momentos de caos y tensión, que hoy por hoy, es un día común y corriente.
Según estudios, ciertas melodías activan el cerebro de la misma forma en todo el mundo, sin importar si eres fan del K-pop o de la cumbia. Básicamente, es un idioma universal que no necesita traducción.
Además, la música nos permite sentir sin filtro. Mientras las palabras a veces no son suficientes para expresar lo que pasa por nuestra cabeza, una canción puede ser el canal perfecto para soltar todo eso que tenemos atorado. Por algo los soundtracks de las películas nos hacen llorar o emocionarnos como si estuviéramos ahí.
Playlists de primeros auxilios
Ya que andamos en esto, aquí les van una lista de canciones para cuando el mundo te quiera volver loco, recomendadas y curadas por el Debayle team:
- “Weightless” de Marconi Union (literal, está diseñada para relajar).
- “Gymnopédie No.1” de Erik Satie (un clásico chill).
- “Blissing Me” de Björk (como un abrazo electrónico).
- “Holocene” de Bon Iver (para tardes melancólicas).
- “Meditation” de Hans Zimmer (banda sonora para tus pensamientos).
Así que la próxima vez que sientan que van a explotar, hagan una pausa, pongan su canción favorita (o alguna de estas recomendaciones) y dejen que la música les recuerde lo importante: todo pasa, y siempre pueden volver a respirar.