Los jugadores del Manchester United decidieron no vestir una chamarra en apoyo a la comunidad LGTB antes del partido contra el Everton después de que Noussair Mazraoui se opusiera a ello.
El defensa marroquí dijo que, debido a sus creencias religiosas, no iba a llevar dicha chamarra, que la marca deportiva Adidas enmarcó dentro de la campaña “Rainbow Laces” con la cual la Premier League pretende visualizar la inclusión e igualdad del colectivo LGTB.
Esta iniciativa comenzó a realizarse en 2013 y este año ha derivado en varias polémicas, después de que Sam Morsy, capitán del Ipswich Town, decidiera desmarcarse del resto de capitanes y no vestir el brazalete arcoíris, y de que Marc Guehi, capitán del Crystal Palace, se arriesgara a una sanción de la federación inglesa (FA, por sus siglas en inglés) por escribir “Amo a Jesús” en dicho brazalete.
Según The Athletic, el resto de compañeros de Mazaraoui decidieron no llevar la chamarra, aunque varios de ellos no estaban de acuerdo con esto.
Pese a no usar la chamarra, el capitán del Manchester United, Bruno Fernandes, sí usó el brazalete arcoíris ante Everton.
DECEPCIÓN
La misma fuente también cita que el Manchester United tiene un acuerdo de más de mil millones de euros a diez años con Adidas y que la firma deportiva está “decepcionada” con la decisión de los jugadores de no apoyar la iniciativa vistiendo esta prenda.
“El Manchester United da la bienvenida a todos los aficionados, incluyendo a los miembros del colectivo LGTB, y estamos muy comprometidos con los principios de la diversidad y la inclusión. Demostramos estos principios a través de diferentes actividades. Los jugadores tienen derecho a dar sus propias opiniones, especialmente respecto a su fe, y estas puedes ser diferentes en ocasiones a las del club”, aseguró el Manchester United en un comunicado.
Mazraoui, por entonces en el Bayern Munich, ya mostró su apoyo en 2023 a Zakaria Abuokhlal después de que este jugador del Toulouse se negara a participar en una iniciativa similar en Francia.