La demanda de la hermanastra de Meghan Markle
Samantha publicó en 2021 un libro biográfico lleno de reproches y hasta burlas sobre Meghan, ‘The Diary of Princess Pushy’s Sister, del que se espera una segunda parte, pero entendía que las declaraciones de su hermana la difamaban de forma imperdonable.
La jueza que ha llevado el caso, desestimó las pretensiones de Samantha tras considerar que las palabras de Meghan se tratan de su derecho a la opinión y a su libre interpretación de los hechos acontecidos en su vida. “Son sólo opiniones y no pueden probarse falsas”, subraya en su escrito.
La que fuera protagonista de la serie ‘Suits’ “describió” en su entrevista con la presentadora estadounidense “sus experiencias subjetivas”, explica la jueza, de lo que no pueden derivarse injurias contra su papá o hermanastros.
¿Meghan Markle habló mal de su familia paterna?
Lo cierto es que Meghan no mencionó directamente a Thomas o a Samantha en su relato sobre lo difícil que fue su infancia y la ausencia de referentes sólidos en su familia paterna. “Crecí como hija única”, apuntaba Meghan en una de las frases que más dolieron a su hermanastra, quien asegura, por el contrario, que ambas tenían una “relación maravillosa” en esos tiempos.
Samantha trató de exhibir el comportamiento de Meghan en varios programas de televisión, pero como no obtuvo el resultado que esperaba, recurrió a los tribunales para tratar de castigar a Meghan y buscar una reparación ante las falsedades que según ella, vulneraban su derecho al honor y dañaban su reputación.
El fallo judicial no lo concibe así, hasta el punto de que defiende el uso que Meghan hace de ciertas metáforas para dar a entender que su vínculo con Samantha y demás hermanastros no fue precisamente cercano.
“Un oyente razonable entendería a qué se refería con eso. La demandada expresa su opinión sobre su infancia y su relación con sus medio hermanos. No es un testimonio objetivamente verificable o sujeto a pruebas empíricas”, argumenta la magistrada.