El juicio de amparo es fundamental para proteger la libertad, la propiedad y la seguridad de los ciudadanos, por eso, es motivo de preocupación la reforma a la ley en la materia que se aprobó en el Congreso, dijo Alberto Pérez Dayán, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Durante la inauguración del Encuentro Nacional para una Agenda de Seguridad y Justicia en Mérida, Yucatán, el ministro dijo que a todos los ciudadanos corresponde defender la integridad del juicio de amparo “a fin de evitar que este medio de defensa sea debilitado o traicionado por algún grupo de la legislatura”.
Este miércoles la Cámara de Diputados avaló la reforma que se presentó inicialmente en el Senado para impedir a los jueces dictar suspensiones con efectos generales, que benefician a personas que no han iniciado un juicio de amparo, pero viven, por ejemplo, en una zona afectada por obras construidas por el gobierno.
Las suspensiones que actualmente dictan los jueces permiten, por ejemplo, detener una obra que no cumple con los requisitos de ley para evitar que se cometan daños irreparables.
Con esta reforma, cada persona que se oponga a una ley que afecte los derechos humanos o el medio ambiente deberá presentar un juicio de amparo.
Pérez Dayán dijo que “la suspensión en el juicio asegura la tutela preventiva de los derechos e intereses colectivos, principalmente de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales”.
Al hacer referencia al derecho a un medio ambiente sano, establecido en el artículo 4 de la Constitución, el ministro se preguntó si la reforma al juicio de amparo servirá para defender el futuro de la actual generación.
“¿Realmente defenderá y protegerá nuestro futuro y el de nuestras generaciones, si quienes lo tramitan no pueden impedir que una actividad que impacta negativamente en el ambiente, se detenga?”.