Las obras en el Tren Maya continuarán a pesar de que un tribunal suspendió la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales había dado a la obra, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“No (se paran obras), porque lo va a resolver la Corte, es un asunto que tiene que resolverlo la Corte en su momento, y no nos va a detener. Si legalmente esa es la decisión, la tenemos que respetar, pero entiendo que no tiene ese alcance”.
El mandatario afirmó que el continuar las obras incluye el desmonte de vegetación, y reiteró que sus adversarios traen una campaña en contra de la obra porque se daña el medio ambiente, pese a que sólo van a desmontarse 100 hectáreas “cuando mucho”, y a cambio de eso se van a reforestar 200 mil hectáreas en toda la ruta del Tren Maya, aunado a 18 mil hectáreas de tres parques ecológicos.
La Asamblea de Defensores del Territorio Maya, Múuch’ Xíinbal, la cual presentó el amparo, aseguró, en comunicado, que el Tribunal Colegiado en Materias del Trabajo y Administrativa del Decimocuarto Circuito confirmó la sentencia de un juzgado de distrito, por lo que las obras de los tramos 1 a 3 del tren, ubicados entre Yucatán y Chiapas, deben estar paralizadas. Explicó que el juzgado aceptó el amparo y ordenó la suspensión de la manifestación, por un principio precautorio.
“Existe una incertidumbre sobre el verdadero impacto del proyecto en cuestión, por lo que debe entonces inclinarse la balanza de la justicia a favor de la naturaleza, especialmente al considerar que su impacto tiene el potencial de trascender a las postreras generaciones y no sólo a quienes habitan en la zona”.
La Semarnat apeló y el juez confirmó la suspensión que incluía que la dependencia encabezada por María Luisa Albores ordenara la suspensión al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), el cual ejecuta la obra. Parte del argumento es que la obra implicará deforestación o puesta en riesgo de especies animales y vegetales. Por lo que los efectos de la suspensión son claros: paralización o cese de las obras.
Los asambleístas acusaron “una tendencia autoritaria que viola la separación de poderes”.