La OMS avisó que la viruela del mono es una emergencia sanitaria mundial, pero ¿qué es y cómo debemos de prepararnos para esto? Aquí les vamos a explicar todo.
Antes de que entremos en pánico les vamos a explicar qué onda con una emergencia sanitaria mundial y cuáles han sido las enfermedades que han detonado esta alerta, así que sigan leyendo.
¿Qué es una emergencia sanitaria mundial?
Una emergencia sanitaria mundial, o emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII), es una declaración formal de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que indica que un evento extraordinario constituye un riesgo para la salud pública de otros estados a través de la propagación internacional de una enfermedad. Esto significa que un brote de enfermedad se ha extendido a varios países y requiere una respuesta coordinada a nivel mundial.
¿Por qué se declaran?
La OMS declara una ESPII cuando:
- Un evento se propaga internacionalmente.
- Representa un riesgo para la salud pública de otros países.
- Requiere una respuesta internacional coordinada.
¿Qué enfermedades han causado emergencias sanitarias mundiales?
A lo largo de la historia, varias enfermedades han desencadenado emergencias sanitarias mundiales. Algunos ejemplos recientes incluyen:
- COVID-19: La pandemia de COVID-19 es quizás el ejemplo más conocido de una ESPII en tiempos recientes.
- Ébola: En varias ocasiones, los brotes de ébola han sido declarados como emergencias sanitarias mundiales debido a su alta tasa de mortalidad y rápida propagación.
- Influenza: Ciertas cepas de influenza, como la H1N1, han causado pandemias y han sido clasificadas como ESPII.
- Zika: El virus del Zika, que se asoció con microcefalia en recién nacidos, también fue declarado una emergencia sanitaria mundial.
¿Qué podemos hacer como ciudadanos ante una alerta de emergencia sanitaria mundial?
Como ciudadanos, podemos desempeñar un papel importantísimo en la prevención y control de las emergencias sanitarias mundiales. Algunas medidas son:
- Mantenerse informado: Estar al tanto de las últimas noticias y recomendaciones de las autoridades sanitarias a través de fuentes confiables.
- Practicar la higiene: Lavarse las manos con frecuencia, cubrirse la boca al toser o estornudar y evitar el contacto cercano con personas enfermas.
- Vacunarse: Seguir las recomendaciones de vacunación para protegerse y proteger a los demás.
- Cumplir con las medidas de prevención: Respetar las medidas de distanciamiento social, el uso de mascarillas y otras restricciones cuando sea necesario.
- Buscar atención médica si presenta síntomas: No automedicarse y acudir a un profesional de la salud si presenta síntomas compatibles con la enfermedad.
- Apoyar a las comunidades vulnerables: Participar en acciones solidarias para ayudar a las personas más vulnerables.
¿Por qué es importante tomar en serio estas emergencias?
Las emergencias sanitarias mundiales pueden tener un impacto significativo en la salud pública, la economía y la sociedad en general. Al tomar medidas preventivas y siguiendo las recomendaciones de las autoridades, podemos ayudar a controlar la propagación de enfermedades y proteger a nuestras comunidades.
¿Debemos entrar en pánico ante una emergencia sanitaria mundial?
Entrar en pánico no es la mejor manera de enfrentar una emergencia sanitaria mundial. Aunque es normal sentir preocupación y ansiedad ante una situación de esta magnitud, es importante mantener la calma y actuar de manera informada.
¿Por qué no es bueno entrar en pánico?
- Dificulta tomar decisiones racionales: El pánico puede nublar nuestro juicio y dificultar que tomemos decisiones informadas y basadas en evidencia.
- Puede generar escasez: Cuando las personas entran en pánico, pueden acaparar productos como alimentos o medicamentos, lo que genera escasez para otros.
- Aumenta el estrés y la ansiedad: El estrés y la ansiedad excesivos pueden afectar nuestra salud física y mental.
¿Qué podemos hacer en su lugar?
- Mantenernos informados: Seguir las noticias de fuentes confiables como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las autoridades sanitarias locales.
- Seguir las recomendaciones: Cumplir con las medidas de prevención que se recomienden, como lavarse las manos, usar mascarilla y mantener el distanciamiento social.
- Preparar un kit de emergencia: Tener a mano un kit con suministros básicos como alimentos no perecederos,agua, medicamentos y artículos de higiene personal.
- Apoyar a nuestra comunidad: Ayudar a nuestros vecinos y seres queridos, especialmente a aquellos que son más vulnerables.
- Buscar apoyo emocional: Si te sientes abrumado, busca apoyo emocional en amigos, familiares o profesionales de la salud mental.