En un nuevo episodio de confrontación, el presidente Andrés Manuel López Obrador amagó con denunciar en los mercados bursátiles donde cotiza Vulcan Materials Company el daño ambiental que ha generado en Playa del Carmen, Quintana Roo, por la explotación de materiales pétreos de la zona.
A esta nueva denuncia, de la cual no dio fecha para cumplirse, se suma la que anunció la semana pasada en cortes y foros internacionales, incluso, hoy dijo que escalará el caso ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“A lo mejor están pensando ellos que ya va a terminar el gobierno y que van a reiniciar sus labores pero vamos a hacer denuncias en la ONU, porque incluso estoy pensando también en hacer una notificación a las bolsas de valores donde cotiza la empresa. Porque todos tenemos que cuidar el medio ambiente de verdad, no estos ambientalistas falsos o seudoambientalistas”, expuso el mandatario federal en conferencia de prensa desde Palacio Nacional.
A principios de mayo, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) clausuró la extracción de piedra caliza a la filial en México de Vulcan Materials, Calica, por el aprovechamiento indebido de recursos naturales.
El gobierno federal sostiene que Calica ha extraído materiales pétreos sin los permisos vigentes y planteó cambiar su giro y que ocupen los terrenos para el desarrollo de un complejo turístico. Sin embargo, esta propuesta no ha sido avalada por el consejo directivo de Vulcan Materials, reveló el jefe del Ejecutivo federal.
Calica tiene interpuesta, en tribunales internacionales, una demanda contra México ante la negativa de renovación de la concesión para continuar la extracción de materiales pétreos. La empresa pide una indemnización de alrededor de 1,500 millones de pesos.
El tabasqueño señaló a dicha empresa de financiar una campaña contra el Tren Maya por daños ambientales en el tramo 5 que va de Tulum a Cancún, que corre a espaldas del terreno donde Calica tiene su planta.
“Ellos son parte de los que están promoviendo los amparos en contra del Tren Maya, es un doble juego muy hipócrita que no tiene nada que ver con los campesinos, que ellos ya dieron todas las autorizaciones, se hicieron consultas, la gente quiere el Tren Maya porque les va ayudar pero eso es por alguna razón, porque se sienten que les va a afectar sus negocios, porque eran los únicos”, comentó el presidente de la República.
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