EFE.- Taiwán dio este martes una cálida bienvenida a los últimos atletas que participaron en los Juegos Olímpicos de París 2024, entre ellos la boxeadora Lin Yu-ting, ganadora de la medalla de oro en la categoría de 57 kilogramos pese a la intensa polémica que enfrentó en torno a su género.
Cientos de taiwaneses madrugaron para acudir al aeropuerto internacional de Taoyuan, ubicado en las inmediaciones de Taipéi, y presenciar la llegada de Lin y de otros deportistas, incluyendo las boxeadoras Wu Shih-yi y Chen Nien-chin, quienes lograron la medalla de bronce en las categorías de 60 y 66 kilogramos, respectivamente.
Al salir del avión, que escoltaron tres cazas de la Fuerza Aérea taiwanesa durante el último tramo del vuelo, Lin se convirtió en el centro de todas las miradas, con decenas de cámaras siguiéndola y múltiples pancartas dedicadas a su hazaña olímpica.
“Como atleta, mi objetivo es concentrarme en obtener el mayor honor, demostrando la fortaleza y el espíritu de Taiwán”, aseguró ante los medios de comunicación Lin Yu-Ting, que recibió el apodo de “hija de Taiwán” en su isla natal.
“Creo que (el título de ‘hija de Taiwán’) es bastante genial, es como despertar de un sueño y encontrarme con la atención de todos. Realmente me siento muy honrada, pero también tengo que asumir más responsabilidades. Quiero ser un ejemplo para todos”, manifestó la púgil taiwanesa antes de saludar a los aficionados del aeropuerto.
ORO Y POLÉMICA
Lin, de 28 años, consiguió el oro en la categoría de -57 kilogramos este sábado tras vencer por decisión unánime a la polaca Julia Szeremeta (5-0), poniendo el broche final a unos Juegos Olímpicos en los que fue ampliamente superior a sus rivales.
La participación de la púgil taiwanesa en estos Juegos estuvo marcada por una sombra de sospecha: al igual que sucedió con la argelina Imane Khelif, Lin fue descalificada del Campeonato Mundial de Boxeo de 2023 por un test de género que determinaba que tenía “ventajas competitivas sobre otras competidoras femeninas”.
El test, que supuestamente reveló la presencia de cromosomas XY y niveles altos de testosterona en las boxeadoras, fue realizado por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), entidad que ya no organiza las competiciones de boxeo de los Juegos Olímpicos debido a problemas de gobernanza, equidad competitiva y transparencia financiera.
El Comité Olímpico Internacional (COI), por su parte, defendió en reiteradas ocasiones la elegibilidad de ambas boxeadoras, sobre la base de que nacieron, crecieron y compiten como mujeres.
ACCIONES
En este contexto, y después de haber recibido multitud de críticas y acusaciones en las últimas dos semanas, Lin confirmó este lunes que no emprenderá acciones legales contra quienes dudaron de su participación en los Juegos Olímpicos de París, en referencia a los directivos de la IBA, puesto que su “valía” ya había quedado demostrada con la medalla de oro.
La boxeadora, que fue abanderada de Taiwán en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos, participará el próximo viernes en un desfile por las calles de Taipéi junto al resto de deportistas taiwaneses, quienes, con dos medallas de oro y cinco bronces, certificaron la segunda mejor participación olímpica en la historia de la isla.