Al menos 48 personas murieron este jueves en un ataque ruso contra una zona residencial de un pueblo del distrito de Kupiansk, en la provincia de Járkov del noreste de Ucrania, denunció el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, desde Granada, España, donde participa en la cumbre europea.
“Un crimen claramente brutal de Rusia, un ataque con misil contra una tienda de productos alimenticios, un acto totalmente deliberado de terrorismo”, escribió Zelenski en su cuenta de Telegram, donde publicó una imagen del resultado del ataque.
Inicialmente, Zelenski dijo que en el ataque habían muerto 47 personas y posteriormente elevó el resultado provisional en un fallecido más.
El presidente ucraniano recordó que está en conversaciones con varios líderes europeos para reforzar las defensas antiaéreas ucranianas y poder proteger mejor sus pueblos y ciudades de ataques como el de este jueves.
“Debemos parar el terror ruso”, agregó Zelenski, que calificó de criminales a “todos los que ayudan a Rusia a burlar las sanciones” que le impiden importar piezas de misiles y otros bienes que utiliza para producir armamento.
“Rusia necesita este y otros ataques terroristas similares para una sola cosa: hacer de la agresión genocida la norma en todo el mundo”, añadió.
Zelenski dio las gracias a “todos los líderes y todas las naciones del mundo” que ayudan a Ucrania a proteger a su población civil.
Por su parte, el jefe del gabinete presidencial, Andrii Yermak, y el gobernador de Járkiv, Oleh Syniehubov, dijeron que las fuerzas rusas bombardearon una tienda y una cafetería en la aldea de Hroza, alrededor de las 13:00 hora local.
Un niño de 6 años estaba entre los muertos por el ataque, afirmó Syniehubov, y otro niño resultó herido.
Con información de EFE y AP.